Miguel Ángel, seminarista que recibirá este sábado el Ministerio del Lectorado : “Con deseo de que el Señor haga su obra en mí, y que me conceda el poder coserme cada vez más a su Palabra”

Jesús Bazán

19 de abril de 2024

Nos acercamos hasta el Seminario Diocesano “San Juan de Ávila” para conocer al seminarista que este sábado recibirá el Ministerio del Lectorado en una Eucaristía a las 12:30hrs en la capilla del Seminario presidida por Monseñor José Rico Pavés, Obispo de Asidonia-Jerez.

1 – El próximo sábado 20 de abril recibes el Ministerio del Lectorado. ¿Cómo te sientes a pocos días de este momento? 

Me siento muy contento, entusiasmado, con muchas ganas de poder recibir este ministerio; Con el deseo de que el Señor haga su obra en mí, y que me conceda el poder coserme cada vez más a su Palabra; que su Palabra se haga vida en mí. Y con la alegría y confianza que da, que la Iglesia me vaya confirmando en la vocación; y me entregué herramientas para poder formarme y dar mi vida de una manera más completa al Señor y a su Iglesia.

2 – Tras un tiempo en el Seminario, y a las puertas de recibir el Ministerio del Lectorado. ¿Te sientes moldeado y llevado por Cristo?

Ya son cinco años en el Seminario y en este tiempo he visto cómo el Señor va moldeando el corazón, las intenciones, los deseos, las expectativas, los proyectos, losafectos; también la madurez personal y claro, esto es llevado totalmente por Jesucristo, muchas veces ni me doy cuenta en qué momento Él ha hecho una obra tan grande, pero estoy seguro que es una obra de Dios. 

¿Qué diferencia hay el Miguel Ángel que entró en el Seminario al de ahora?

Muchísima diferencia para bien; claro que hay un cambio en todos los aspectos, pero yo destacaría, sobre todo: el de la confianza en Él; de ir purificando ese sí a su llamada. También un aspecto que considero importante es el del conocimiento propio; de las virtudes y de las debilidades, de la necesidad de Dios, de Jesucristo, de ir llevando la Cruz día a día y de los memoriales que Él va haciendo en la vida. También en aprender a vivir y trabajar en comunidad y el crecimiento a nivel intelectual.

3 – En todo este proceso de formación, ¿qué momento recuerdas de forma especial que sentiste como el Señor te ayudaba y acompañaba? 

Son muchos, pero yo destacaría la Semana Santa del año pasado; cuando tenía la gracia de ser padrino de un sobrino. Un sobrinito que nació y tuvo muchas dificultades de salud, los médicos estaban muy preocupados, incluso el niño tuvo un paro cardiorrespiratorio y fue bautizado de emergencia en el hospital. Fue una prueba que el señor me ponía para interceder por mi familia, para confiar en Él, para dejarle todos mis deseos y mis afectos, para poder ejercer la intercesión. También me sentía muy acompañado por su Iglesia, por los compañeros del Seminario, por los formadores, por los monasterios, que rezaron mucho, por mi comunidad, y por muchas personas; y al final el señor me concedía la gracia de poder acompañarlo y completar su bautismo cuando se recuperó milagrosamente. En esta situación, sentía ese llamado grande que el señor me hacía y agradecerle por estar en el Seminario, estar en la Iglesia,de tener todas las facilidades para rezar. Fue un momento importante en mi vida, que me concedió el interceder y confiar grandemente en Él.

4 – Con este ministerio debes convertirte en transmisor de un profundo amor a las Sagradas Escrituras. ¿Impone está misión a la que la Iglesia te llama? ¿Qué más tareas tienes que realizar? 

Este ministerio está intrínsecamente relacionado con la proclamación de la palabra del Señor; y para proclamarla, hay que experimentarla, no solo saber leer bien, o tener una correcta dicción, sino, sobre todo rezar con esta palabra; que es verdad que me la creo, que la vivo, que la experimento y que la puedo anunciar como una palabra de Salvación.  A partir de ahí implica rezar con la palabra de Dios, anunciarla sin ningún miedo y con total certeza de que es Dios mismo quien está hablando hoy.

5 – Durante esta preparación para el Ministerio del Lectorado, ¿has tenido alguna oración especial que te esté ayudando?

Últimamente me resuena especialmente esta bella oración de San Agustín.

 «¡Señor, dame lo que me pides y pídeme lo que quieras!!

6 – ¿Qué pasaje o lectura de las Sagradas Escrituras destacaríais? ¿Qué te dice ese pasaje para que lo escojas?

Isaías 55, 10-11:  Como descienden la lluvia y la nieve de los cielos y no vuelven allá, sino que empapan la tierra, la fecundan y la hacen germinar, para que dé simiente al sembrador y pan para comer, así será mi palabra, la que salga de mi boca, que no tornará a mí de vacío, sin que haya realizado lo que me plugo y haya cumplido aquello a que la envié.

Esta palabra pienso que resume lo que es el Ministerio del lectorado; primero es una entrega de la Iglesia, o sea, una obra que Dios quiere hacer en mi vida; y que implica que la Palabra, las Sagradas Escrituras, tienen una actuación en mi vida: como como la lluvia sobre la tierra… y también que al proclamar esta palabra en la asamblea litúrgica trae esta consecuencia, de realizar lo que el Señor quiere hacer.

7 – Mensaje para los jóvenes que por cualquier circunstancia no son capaces de decir sí al Señor y seguir su voluntad sea cual sea su vocación.

Cómo dice nuestro Obispo D. José; pedirle al Señor que les muestre cuál es su lugar en la iglesia, cuál es la misión que les tiene encomendada para hacer fecundo elbautismo; y a partir de ahí no tener miedo, no tener miedo,porque el señor siempre les va a dar con creces; y va a cumplir los deseos de nuestro corazón si es Su voluntad y nos conviene; así que yo les invito a arriesgar en nombre del Señor. Como dice el salmo 17: En tu nombre me meto en la refriega, en tu nombre asalto la muralla.

Diócesis Asidonia - Jerez